¿Sabías que el 75 % de los emprendimientos no llegan ni al año y que el motivo de su desahucio no siempre tiene que ver con la falta de recursos? En esta oportunidad hablaremos acerca de 3 elementos que considero clave para que tú negocio no solo sobreviva, sino que crezca.
Como bien sabes, hay una ola de agitación social en torno al tema de emprender. Personas que siempre se han sentido tranquilas en sus empleos de repente se sienten en desventaja. Y personas que siempre se han sentido orgullosas de las corporaciones que representan lo asocian con tiranía. Son estas mismas personas que deciden soltar la estabilidad para apostar por la aventura, muchos de ellos sin prepararse.
La Obsesión Operativa
Solemos creer que si somos buenos haciendo algo, ya tenemos el éxito garantizado. La verdad es que esto es, a mi juicio apenas 1/3 parte de lo que hace que tu negocio salga adelante. Muchos de los restaurantes que quiebran no tienen nada que ver con la calidad de la comida, ni con la experiencia del chef. Incluso podemos ver lo contrario, que hay lugares de venta de comida de muy mala calidad que les va bien. ¿Cómo se explica esto?
Lo primero que debes saber es que la operatividad de tu negocio es solamente una parte. Si piensas que toda la operación de tu negocio debes hacerla tú, entonces no tienes un negocio, tienes un sustento. Los profesionales independientes entran en esta categoría.
El Ímpetu Mercantilista
Otra de las cosas que suelo escuchar con una enorme frecuencia es la idea de que todo es marketing y marketing lo es todo. Si esto fuera cierto, ser estafador sería el secreto del éxito. Dejarlo todo en manos del envoltorio es una ofensa que hacen los superficiales hacia quienes no somos impulsivos.
Pero tampoco es que pasemos por debajo de la mesa la capacidad de saber mostrar lo que tenemos para ofrecer. Saber comunicar nuestras ideas, crear relaciones de valor, cuidar de nuestros clientes y ofrecer experiencias inolvidables, es uno de los elementos que aporta otro 1/3 a nuestro negocio. Si además de esto sumamos un producto de calidad, vamos por buen camino.
La Magia Financiera
Este es el elemento que casi nadie toma en cuenta, pero que tumba imperios y pulveriza trasnacionales. El cuidado del dinero es fundamental dentro del crecimiento orgánico del negocio y lo que le garantiza estabilidad a largo plazo. Ha de ser tan importante para mí, que yo personalmente elijo con quien asociarme según su relación con el dinero y su capacidad de proyección financiera.
Dentro de la jerga del sector hay algo que se llama “tasa de reinversión”, que no es más que el porcentaje de las ganancias del negocio que son puestos nuevamente dentro del negocio para que este crezca. Quien lleva un negocio como un sustento, suele dejar la caja en blanco apenas cobra las facturas, y evidentemente vive constantemente en los mismos apuros de flujo de caja en su negocio, mes a mes (que es posible sea el mismo problema que tenía con su salario cuando era empleado).
Saber crecer un negocio requiere mucha disciplina y compromiso, más que pasión o euforia. En general las personas muy entusiastas suelen ser también muy depresivas, y eso los lleva a llevar su negocio como carrito chocón. Por eso se habla tanto de la inteligencia emocional como factor de éxito en la vida.
Cuando aprendemos la magia del autocontrol aprendemos también a crecer nuestro negocio sobre estas tres bases: operaciones, mercadeo y finanzas todas en igual medida. Los elementos de un negocio que crece.
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