Servir con amor siempre es rentable

El concepto de servicio proviene del latín servitĭum. El mismo hace referencia a la acción servir.

Este concepto tiene múltiples acepciones desde la materia en que sea tratada.

Los servicios, son las actividades que intentan satisfacer las necesidades de los clientes. Ellos son lo mismo que un bien, pero de forma no material o intangible. Esto se debe a que el servicio solo es presentado sin que el consumidor lo posea.

Nuestra querida Joselyn Quintero siempre dice «el dinero es la bendición de nuestros talentos y servicios realizados con el alma».

Por eso al escribir sobre servicio hacemos referencia de qué manera tú ves una necesidad. En tu ciudad, tu contexto, en tu planeta. Que puedas identificar con claridad de que manera te gustaría prestar amorosamente a las personas un servicio. Ayudarles a resolver de una manera fácil, fluida y cómoda su vida o necesidad y además te paguen por ello.

Por eso vemos hoy día muchos emprendimientos o negocios para solucionar situaciones específicas.

En particular, cuando hacía el Máster de Armonía Financiera, descubrí la maravillosa energía que se generaba, cuando eres portador de nuevas noticias. Allí me dije quiero laborar de manera de ser la mensajera de buenas nuevas. Porque ver como se les ilumina el rostro a las personas es totalmente satisfactorio.

¿Como puedes identificar con tu alma que servicio puedes prestar?

1. Para ello, puedes conectar con tu sentir por unos 7 minutos. Respirando y exhalando, al principio con los ojos cerrados. Luego, puedes abrir los ojos y observar lo que te rodea, sin hacer juicios o etiquetas. ¿Qué quiero decir? Que observas una silla, sin pensar es una silla. Esto es realmente una forma de entrenar tu mente. Recuerda que siempre te he dicho que todo trabajo personal, te lleva a un entrenamiento de tu ser.
2. En ese estado te conectarás con tu sentir al preguntarte: ¿qué mensaje o servicio realmente quiero entregar o dar a las personas? ¿Con que me siento en paz haciendo? Con este sentir, estarás alineado con tus valores y con tu misión de vida. Comenzarás a identificar tu propósito de vida. En el sentir puedes identificar una sensación de paz al dar o servir.
3. Una vez identificado tu tipo de servicio a ofrecer, tu misión, visión, puedes comenzar a organizar y planificar tu emprendimiento. Estar atento que no es lo mismo emprendimiento que oportunismo.

Aquí te invitaré a formar parte de nuestra comunidad en Facebook, llamada «ArmoniaF Comunidad». Donde Joselyn Quintero regala y enseña tips para aprender a manejar tu propio negocio con orden en tus finanzas. Y así puedas brindar lo mejor de ti con el talento que Dios te ha dado. Igualmente puedes leer, en cada edición, la sesión de ArmoníaF y Mandala de negocios.

Servir con Amor

Para mí, identificar servir al prójimo siempre ha sido revelador. Ya que cuando lo hago desde el alma, me descubro hablando y diciéndome algo relevante y valioso para el otro, pero inclusive para mi. Te ves frente a situaciones que te hablan.

Servir con el alma, te lleva a crear relaciones con personas que pueden llegar a formar parte de tus círculos sociales, es entonces cuando descubre un radio de acción de la energía del amor. Es así como cuando lanzas una moneda o piedrita a un lago tranquilo, ves una onda, y cuando toca sus bordes se devuelve.

Servir esta estrechamente entrelazado con el dar y recibir. Cuando lo hacemos con desconocidos, y le brindamos opciones en su día a día eso puede ser la gran diferencia para esa persona, que no encontraba una solución y tu hablando desde tu propia experiencia le diste respuesta. ¿Y sabes por que ocurre eso? Porque el Espíritu Santo nos usa como su instrumento. Por eso dar y recibir, es siempre lo mismo, siempre entregas amor es a ti mismo.

Recuerda que dar con amor, desde cualquier lugar donde decidiste hacerlo, no cuesta nada y te devuelve mucho más, porque de esta manera te bendices.

Gracias por permitirme compartir estos pequeños pero grandes tips que hacen la gran diferencia en tu día a día.

Nos encontramos en un espacio de luz y amor en la próxima reflexión.

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