servicio

¿El Servicio es Obligación o Satisfacción Personal?

ArmoníaF Team Tu Mística Leave a Comment

Servicio. Esa palabrita que, cuando no se tiene claro su concepto, para unos suena a obligación y/o sacrificio. Para otros suena a gran satisfacción personal.

¿Por qué una cosa y la otra?

 

Les confieso que yo llegué a ser de las que creía que servir a otros, implicaba una obligación. A la vez me generaba cierta rebeldía, aunque responsablemente «servía» a otros en diferentes momentos. Tanto en el área laboral de mi vida, como en la relación con familiares, amigos, vecinos, etc.

Hay muchos momentos en la vida en la que hacemos cosas para ayudar a alguien, renunciando a algo. ¡Para servirte! es la respuesta, las veces que nos dan las gracias. Pero, ¿estoy sirviendo de verdad, o estoy dejando de hacer algo para atender a otro?

Quizás, fue por esa razón que muchas veces sentía rechazo o rebeldía ante la figura del servicio. Me daba cuenta de que empezaba a ser un rehén psicológico de mi entorno. Y me resistía a transformarme (inconscientemente) en cómplice de aquellos que me estaban absorbiendo.

Según mi experiencia personal, y a medida que fui poniendo atención a esa sensación de bienestar que percibía al momento de servir de la manera que lo hacía. Me fui relajando y cada vez daba mejor y mejor servicio. Sentía una gran satisfacción al recibir muestras de agradecimiento. Y, sobre todo, me ponía feliz cuando alguien se alegraba con el servicio que le entregaba, en diferentes roles de mi vida.

De hecho, siento que mi concepción de servicio fue cambiando poco a poco hasta la actualidad. Servir es hoy en día, casi que mi estado permanente.

Resistencia a servir

 

Mi resistencia venía de que muchas veces, no optaba por el servicio, sino por el sacrificio y ambas cosas son distintas. El servicio es noble, el sacrificio es deslealtad hacia uno mismo.

Leyendo en la web a Jorge Olguin, dice: «No se puede edificar un castillo de luz sobre cimientos de sombras», confundiendo sacrificio con servicio. Y también dice: «Si el amor impersonal, en lugar de apoyar al amor personal, lo obstruye, se rompe el equilibrio». Por último, el sacrificio no es noble, solo lo es el servicio a nuestros semejantes. Pero sin dejar de pensar en nosotros. Ese es el verdadero servicio.

Y como en muchos de mis artículos, voy al diccionario a mirar las definiciones de ambos términos.

Sacrificio: renuncia voluntaria a algo o privación que uno mismo se impone o acepta.

Servicio: acción de servir, prestar ayuda o hacer un favor a otro semejante. Ponerse a disposición de otra persona. Ser útil para determinado fin o para realizar determinada función.

Fíjate que en esta última definición no se habla de renuncia, ¡porque no es necesaria!

Se puede dar ayuda sin necesidad de una renuncia, el verdadero servicio no te lo exige a cambio.

Dios nos ama y nosotros le respondemos a ese amor sirviendo. Pero si lo hacemos acompañado de una renuncia, estamos traicionando a ese amor. Porque nos lastimaríamos a nosotros mismos y eso es karmático. Muchas veces en mis consultas les he llegado a preguntar a mis clientes: ¿cómo puedes hacer felices a otros si tú no lo eres? Estás siendo hipócrita, porque no hay coherencia en el supuesto amor que entregas ya que renuncias a amarte a ti mismo.

El verdadero servicio, no es un castigo ni una obligación. Se asume como gozo al ver felices a aquellos que reciben el favor.

Si al prestar ayuda a nuestros semejantes, eso nos genera daño en vez de gozo, el equilibrio se rompe. Pues el servicio es felicidad, no sufrimiento.

El verdadero servicio

 

El verdadero servicio, el que se hace con amor, trae gozo. Por el contrario, el sacrificio hace que el sufrimiento impuesto por la renuncia o la privación implícita, no nos permita ser feliz. Eso nos puede costar sobrellevar con facilidad la vida cotidiana, y entonces caemos en la victimización.

En conclusión, al servir desde el amor de verdad, estás entregando bendiciones, y de retorno recibes la bendición del gozo.

En Astrología, mirar el servicio en su pureza, se relaciona muchísimo con el signo Virgo. El área de tu Carta Natal en la cual se ubique este signo (tomando en cuenta también, los planetas en Virgo), puede hablarnos de tu disposición de servicio. Evidentemente, hay que revisar otros emplazamientos en la Carta Natal, como por ejemplo el signo solar y el signo lunar.

Hay varios aspectos a analizar, partiendo de que el signo contrario de Virgo es Piscis. Este es considerado el signo del sacrificio; y todo signo opuesto es espejo.

Yo, particularmente, tengo la Luna (que representa las emociones, los hábitos, la respuesta instintiva), en el signo Virgo; al igual que mi Nodo Norte, que marca la misión de vida, también en el signo Virgo. Este último emplazamiento también lo tiene mi querida Joselyn Quintero en su Carta Natal, definiendo claramente, hacia dónde queremos ir.

Para terminar, por aquí les dejo algunos nombres de personajes célebres que son del signo Virgo: Luis Federico Leloir (médico, bioquímico y farmacéutico argentino que recibió el Premio Nobel de Química); Madre Teresa de Calcuta (misionera); Michael Jackson (cantante y compositor); Jorge Luis Borges (escritor argentino). Ellos ¿han servido o no a la humanidad?

¡Hasta el próximo encuentro astrológico!

Escrito por

¿Quieres la Revista ArmoníaF?

Más de 3.000 personas reciben cada mes nuestra revista digital totalmente gratis. Recíbela tu también, por email y sin importar donde vivas. Puedes tener la primera hoy mismo: