¿Por qué no prósperas justo en ese tema que tanto te interesa?

ArmoníaF Team Saber Estar Leave a Comment

Tengo la certeza de que la vida nos hace esforzarnos, pero nunca desgastarnos. Es decir, podemos hacer esfuerzos para lograr, pero cuando nos vemos envueltos en sacrificios constantes para ello, algo no anda bien. ¿Por qué no prósperas si tanto te esfuerzas?

Estoy convencida en que perseverar es altamente efectivo en el logro de metas. En ocasiones no mido hasta cuándo es que se puede seguir en ello o cambiar de estrategia u objetivo si hace falta.

Supongo que alguna vez te ha sucedido. Te empeñas en adquirir algo nuevo. En conseguir pareja o dejarla. O en estudiar eso que crees te hará mucho bien. Tal vez en empezar de nuevo la dieta, dejar el mal hábito, en seguir haciendo ese trabajo que te causa tanta incomodidad…. ¿Te empeñas?

Cuando no lo logro, la conclusión a la que he llegado es que no es cómo lo estoy haciendo. Es un metamensaje (mensaje profundo no evidente a simple vista) que va intrínseco en la cuestión.

No puede ser que continuemos haciendo lo mismo una y otra vez sin obtener resultados. A veces, tanta vehemencia en un asunto está relacionado con una “lealtad ciega” profunda. Es decir, con una creencia instalada en el subconsciente que nos dice que si eso no sale así, como esperamos, estamos en riesgo. Sin darnos cuenta, que el riesgo mayor se da en la lucha constante en contra de lo que sucede. Desgasta más, nos mantiene dando vueltas en el mismo eje y no próspera.

Frecuentemente aquí viene la polaridad interna. Esa disfrazada de angelito o de diablito a decirnos: -Ajá! Otra vez en lo mismo, de nuevo tú, haciendo tal o cual.- Y nuestro Ser cabizbajo con la autoestima resentida porque el objetivo no se cumplió, se aleja aún más de su concreción.

Resulta que desde el estudio de la Programación Neurolingüística y de las Constelaciones Familiares podemos preguntarnos si es precisamente perfecto así, como está sucediendo. Quizás la clave para prosperar es que no se cumpla el objetivo. Cambiar el lugar desde dónde vemos las cosas. Hacer las paces con “eso” con lo que nos peleamos tanto dentro de nosotros, ya abre el camino.

¿Por qué no prósperas?

 

Cuando se habla de “lealtad ciega” en Constelaciones Familiares, nos referimos aquellas creencias heredadas que no somos capaces de ver conscientemente. Las cuales vamos repitiendo en nuestras vidas. Por ejemplo: la vida es difícil, debo encargarme de sostener, sino cuesta no se alcanza. Así, de forma muy subconsciente vamos buscando experiencias que nos ayuden a reafirmar esas creencias que han viajado por años a través de nuestras familias. Y que una vez que logramos mirarlas desde el amor compasivo podemos asentir y transformar  honrosamente, dando lugar al ente origen de dicha creencia.

Integrar la energía excluida pueden tener una psicogeografía diferente. De pronto si sabemos que algunos de nuestros ancestros fueron alcohólico, entonces la adicción a la comida ya no es tan mala. Si comprendemos que las pastillas o el tabaco sencillamente conectan con la necesidad de descanso y reposo mental entonces está protegiendo del colapso nervioso. Si ampliamos la mirada y aceptamos que encargarnos de otros ya no nos corresponde, porque el abuelo lo hizo ya. Sí, y solo sí, asentimos al presente,  un nivel de comprensión mayor puede surgir  para acabar con  la lucha  e impulsarnos a prosperar.

Tomarse el tiempo, los recursos, enfocar la intención para ver aquello que no fructifica  en nosotros, nos puede llevar a la respuesta adecuada que precisamos. Si esta no emerge, siempre podemos buscar ayuda de un buen Constelador o Coach. Pero lo que sí es claro, es que lo que no prospera a pesar de nuestros arduos esfuerzos, es una posibilidad mágica de reconciliarnos con algo mayor que aún no se ha revelado y que cuando surge se convierte en una bendición que nos permite hacerlo diferente y nos redime. Te seguirás preguntando, ¿Por qué no prósperas?

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