Soy de las que creo que en cada experiencia hay una oportunidad. Lo que pasa es que no siempre la captamos, y en otras ocasiones no la asumimos. Ya sea por miedo, necedad, ego o por distracción. O porque estamos cómodos.
Por otro lado, no creo en eso de que, si no la aprovechaste, ya no volverá a presentarse. Siempre habrá la oportunidad para algo.
Dejar pasar las oportunidades puede significar no poder lograr más tarde lo que se quería obtener. Pues las circunstancias son variables. Aunque también puede ocurrir que se presente más adelante una nueva oportunidad aún mejor que la anterior.
Estar atentos es la consigna, y esto habla de estar enfocados.
Precisamente, indagando en la web, me conseguí con esta etimología de la palabra “Oportunidad”. Viene del latín “opportunitas”. Vocablo que se integra de “ob” (en frente de, en contra de), y se interpreta como “hacia”, y “portus” que significa “puerto”. Indicando en sus inicios, el conjunto de condiciones propicias naturales que debían darse para que la embarcación llegara al puerto de modo seguro, y el conocimiento que de ellas tenía que tener quien la comandara, para aprovecharlas de modo eficaz (Deconceptos.com).
Hoy en día cuando hablamos de oportunidad, nos referimos también a una serie de factores, natural o socialmente, que pueden contribuir a que nuestras acciones. Cualesquiera que sean, “nos lleven a buen puerto” o sea, al objetivo deseado.
Cada vez que hago una consulta astrológica, ya sea una Carta Natal, Revolución Solar, tránsitos, o algún otro análisis, siempre mantengo que las energías se manifiestan en el cielo para aprovecharlas.
Indiscutiblemente, hay energías densas, pero allí, en esa oscuridad también puede haber una oportunidad. Porque esto nos permite tener una visión desde otro ángulo y tomar decisiones para ponernos en acción.
Oportunidad en el cielo
Poniendo un ejemplo: si se da una oposición de Mercurio con Venus, quizás sea un momento favorable para tomarse unas vacaciones cortas o un viaje de placer. El tono de este momento es liviano, amistoso y fácil.
O cuando hay un aspecto en el cual el Sol (transitando uno de los signos del zodíaco en el cielo), se pone en Trígono con el ascendente de la persona en su Carta Natal. Seguramente tenga más energía y disposición en ese momento. Si hay un trígono de Mercurio con Saturno, es buen momento para buscar consejo profesional.
Observando el cielo, puedo captar oportunidades. No quiero decir que las oportunidades se den para hacer solo cosas correctas o buenas. Lastimosamente, también se presentan oportunidades para hacer cosas indebidas.
No obstante, aquí hablamos de oportunidades para crecer, para sentirnos felices y serenos, para lograr objetivos de evolución. Vamos a ir hacia donde nos toque crecer. Insisto en que, enfocarnos y poner atención nos agudiza la capacidad de percibir las oportunidades en nuestro día a día.
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