En el mundo apremia la velocidad por los resultados rápidos y conseguir el éxito inmediato. Cuando era pequeña siempre aquello que era difícil, se resolvía con constancia bien enfocada. Eso me ha hecho pensar en la cantidad de tiempo que he perdido los últimos años. He dejado de hacer lo que me resulta fácil para enfocarme en aquello que es más difícil y complicado para mí. Con el tiempo descubrí que es mejor delegar aquello que no se me da bien para enfocarme y ser constante en aquello que me resulta fácil y productivo.
La mayoría hemos distorsionado lo que significa ser constante. En algunos casos se ha convertido en algo extremo. Donde hacer por hacer, sin foco, solo pensando que esa constancia y exceso de producción nos va a llevar al éxito o el resultado que queremos.
Lo hacemos llenando nuestras redes de publicaciones. La mayoría desconectadas de tu verdadero proyecto, porque estoy siendo productiva. Pensando que eso me va a llevar a unos logros o resultados siempre positivos. Esto es una forma equivocada de ser constante.
Son muchas las personas que han llevado la constancia sin enfoque al extremo de una manera desmedida. Por la vieja creencia de si dedico más horas a trabajar, voy a tener éxito más rápido. Esto ha hecho surgir una enfermedad llamada “burnout”. Que traducido significa síndrome de desgaste profesional o síndrome de estar quemado, reconocida desde enero de 2022 como enfermedad profesional. Grandes profesionales quemados por un exceso productividad mal enfocada.
La constancia sin enfoque es como regar todos los días un árbol para que crezca. Cuando crearás el efecto contrario. También tenemos el otro extremo. Cuando tengo claro lo que quiero y todos los inicios de año decido ser constante. Me lleno de libros de cómo crear hábitos, de cursos, pero sigo esperando una varita mágica que me haga salirme de mi zona de confort.
Constancia bien enfocada
Y si reflexionamos un momento, ¿Cuánto de constante estás siendo en tus proyectos o metas en tu vida? ¿Realmente le estás dedicando el tiempo que lleva tu proyecto, o te estás entreteniendo por el camino con los deberías sin acción? ¿Cuánto de esa constancia está llevando al extremo tu salud? ¿Estás siendo tan constante en tus metas y en tus proyectos, hasta el punto que te has desconectado de tu verdadero ser, y el sentido de lo que quieres lograr?
Hacer por hacer sin foco no es un camino al éxito. Seguro has notando el cansancio, la frustración y el desasosiego. Sé que cuesta ser constante en un proyecto para ver los resultados a largo plazo.
Cuando pienso en constancia me viene a la cabeza mi vecino. Él tiene 91 años, le cuesta un poco caminar. Él solo está construyendo un edificio para sus dos hijos, a ellos nunca los he visto. Semana tras semana durante los tres últimos años ha estado construyendo esa casa que prácticamente está terminada.
Cada vez que cojo el coche por las mañanas veo el avance, creo que no es casualidad que sea lo primero que veo en el día. Él tenía una idea, el conocimiento, se le hace fácil, sin importar la edad, y el tiempo que le lleve. Tiene claro el resultado. Solo aplica ser constante.
La constancia bien enfocada te da vida, y nada te la quita.
Luz Divina Rodríguez García.
Ver también Vive tu bienestar interior como prioridad
Vídeo Sobrevivencia y trascendencia
¿Quieres la Revista ArmoníaF?
Más de 3.000 personas reciben cada mes nuestra revista digital totalmente gratis. Recíbela tu también, por email y sin importar donde vivas. Puedes tener la primera hoy mismo: