Envejecimiento

El Envejecimiento Consciente

Joselyn Quintero La vieja medicina del futuro Leave a Comment

Cuando decimos que un individuo luce viejo a los cuarenta años y que otro es joven a los setenta, ¿qué nos sugiere esto? Lo que indica es que envejecemos en el tiempo, pero que el tiempo no es la causa del proceso de envejecimiento.

Existe una serie de factores que deterioran nuestras funciones y aumentan el riesgo de morir que se acumulan con el transcurso del tiempo. Pero que solo están relacionados con la edad incidentalmente. Así como envejecer no implica madurar, envejecer tampoco implica deterioro.

Si sometiésemos dos piedras a un proceso continuo de erosión por el agua, notaríamos que se desgastarían a distintas velocidades dependiendo de las respectivas durezas y densidades.  Lo mismo ocurriría con dos individuos cualesquiera. Ambos sujetos a influencias deteriorantes similares.

Envejecerán a un ritmo también variable acorde con la resistencia que cada quien ofrezca a las fuerzas desgastadores. Pero los seres vivientes no somos materia inerte. Tenemos la capacidad de auto repararnos y regenerarnos cuando se excluyen las causas del desgaste y envejecimiento.

Cumplir años no es una enfermedad. De hecho muchos pueden aprender a apreciar y disfrutar intensamente todas y cada una de las etapas de la vida. Esto incluye los llamados “años dorados”. Pero envejecer sí que lo es.

Cuando la disminución de la fuerza vital, la dificultad para ver, oír y recordar es muy acentuada, se hace poco tolerable este proceso natural. Existe, como dijimos, un ritmo natural de envejecimiento en condiciones de cuido personal.

También un ritmo acelerado que lleva al envejecimiento precoz en condiciones desfavorables. El primero se puede atenuar con un tratamiento preventivo y el segundo se debe tratar para revertir el proceso hasta donde sea posible.

El ser humano debería (naturalmente) poder alcanzar a vivir unos 120 o 140 años sin perder significativamente las capacidades intelectuales. Sin embargo, hoy en día, a edades muy precoces comienzan a notarse signos de envejecimiento.

Consecuencias del envejecimiento

 

Bioquímicamente se nota una disminución de la monoaminoxidosa en el sistema nervioso central. Lo que lleva a una reducción de las funciones neutransmisoras de la dopamina, serotonina y catecolamina. Asignando a esto la principal causa de depresiones y parkinsonismo de la vejez.

También existe la tendencia en el ser humano a ir perdiendo la vitalidad y la memoria. A tornarse los huesos quebradizos y a formar arteriosclerosis.

Se hace notable una disminución del diámetro de las arterias y vasos sanguíneos. Esto disminuye el rendimiento de los órganos por suministro deficiente de oxígeno.

Se presenta hipertensión, aumento del colesterol arterial. Incrementando la posibilidad de derrames, embolias y paros cardíacos. Además, conlleva a un aumento de los radicales libres y una disminución de la capacidad antioxidante del organismo.

Paralelamente disminuye la capacidad de asimilación de los nutrientes de la alimentación. Esto trae como consecuencia la tendencia a consumir cantidades mayores de alimentos a la par que la actividad física se reduce. Por lo que el resultado es tun aumento en  la formación de tejido graso y disminución de la masa muscular.

Tomado del MANUAL DE LA SALUD sobre JUVENTUD PROLONGADA

Escrito por: Dr. Efraín Hoffmann.

Escrito por

Joselyn Quintero

Facebook Twitter

Asesora Financiera con especialización en Psicología Financiera y Neuroeconomía. Creadora de ArmoníaF y Mandala de Negocios. Convirtiendo el dinero en una herramienta de bondad y amor para el bienestar del mundo.

¿Quieres la Revista ArmoníaF?

Más de 3.000 personas reciben cada mes nuestra revista digital totalmente gratis. Recíbela tu también, por email y sin importar donde vivas. Puedes tener la primera hoy mismo: